Poco podía imaginar el gran Mies Van de Rohe que allá por el año 1929 el modelo MR90 o más conocido como la silla Barcelona se convertiría en una de las sillas más icónicas del siglo XX y, también, de las más imitadas.
La famosa silla Barcelona fue diseñada por Ludwig Mies Van de Rohe y Lilly Reich para el proyecto de El Pabellón Nacional de Alemania para la Exposición Internacional de Barcelona en 1929. “El Pabellón” que también fue llevado a cabo por ambos arquitectos, es actualmente considerado por muchos como la obra maestra del arquitecto alemán y una de las obras arquitectónicas más influyentes del siglo pasado. Además, le valió para impulsar su carrera siendo hoy en día todo un referente en el mundo de la arquitectura.

La silla Barcelona se mostró en El pabellón (ante un público expectante) como un artículo de perfil sencillo, pero con corte moderno. Mostraba una estructura en acero cromado atornillada y asiento de cuero de piel de cerdo en color marfil y relleno que encajaba con la arquitectura moderna del momento. Las proporciones (perfectamente estudiadas) y su diseño elegante la convirtieron en un auténtico artículo de exposición alcanzando una proyección internacional sin precedentes en aquel momento.
Esta pieza icónica está inspirada en las antiguas “sella curulis”, utilizadas en la época romana como símbolo de poder.

La producción comercial de la silla Barcelona comenzó justo un año después de su aparición debido a su rotundo éxito. Sin embargo, su complejo y costoso proceso de fabricación (prácticamente todo es hecho a mano), hicieron que Mies van de Rohe la rediseñara en 1950 para su producción en serie. En este nuevo diseño, el marco de la silla era de acero inoxidable y se podía fabricar en una sola pieza para facilitar su producción en masa. Pero, incluso este nuevo diseño, presentaba y presenta dificultades para su producción masiva.
El nuevo estilo de la silla Barcelona conjuga el diseño, la comodidad y la ligereza de lo que fue el modelo MR90 en sus inicios.
Actualmente, la firma estadounidense Knoll es quien tiene los derechos para su producción desde 1953. Knoll fabrica esta pieza icónica con estructura de acero plano cromado y cinchas y cojines de cuero de bovino en capitoné relleno con espuma de polieuretano en sus versiones más actuales. Sus medidas son 75 cm de ancho x 76 cm de profundidad x 76,8 cm de altura y su precio comienza en los 5630 euros.
Además, la firma estadounidense hizo en su día una réplica de aquellas dos sillas que se mostraron en el ’29 en el Pabellón de Alemania, y que puedes ver en el conocidísimo Museum of Modern Art (MOMA) de Nueva York.
Siendo una de las piezas de decoración más copiadas, actualmente se puede encontrar en el mercado numerosas imitaciones con un precio bastante más asequible que la silla original y con unos acabados muy conseguidos y de mucha calidad.
Casi es más fácil construir un rascacielos que una silla
– Mies Van de Rohe –
Variante de la silla Barcelona de Ingenia Contract.
Sillón Barcelona B: El sillón BARCELONA B es un guiño al clásico diseño de la pieza icónica fabricado con estructura en acero cromado.